El cambio de mentalidad de Justino (CIO a CEO)

¡Qué interesante es que una sola letra te haya cambiado la vida! – Le solté a mi amigo, lleno de orgullo por su nuevo puesto- pero aún mas interesante es que te haya obligado a cambiar la mentalidad mi estimado amigo …

Así iniciamos una charla más con mi amigo Justino, ahora le han encargado una nueva responsabilidad y esta vez tuvo un cambio radical en su vida y su mente, Justino inicio siendo desarrollador de sistemas, Líder de proyecto, Gerente, ha sido Director Digital, Director de Innovación, y CIO de un Banco, ahora dada su experiencia y al parecer el board entiende que el negocio ahora es digital, lo han nombrado CEO de BancoT, que es la empresa donde ahora labora mi amigo.

Me ha contado Justino lo que le ha pasado y va más o menos así:

Me citó Pablo Patiño en sus oficinas amigo, él es el Chairman del grupo empresarial al que pertenece BancoT, es mi jefe en pocas palabras y la reunión se tornó algo así:

Hola Justino – me saludó muy cordialmente Pablo – como primera instrucción de tu nuevo puesto, necesito que me ayudes a definir la estrategia de BancoT para los siguientes 3 años y apenas la tengas la revisamos en conjunto ¿te parece bien?

-Claro Pablo, la preparo y te busco la semana siguiente para detallar y afinar puntos por favor – y nos despedimos amigo, iba muy contento y apenas salí de su oficina, empecé a maquinar ideas y conceptos, tenía presupuesto para hacer muchas cosas y estaba muy contento, por fin mi momento amigo, y sentía que dejaría huella y me convertiría en leyenda

Ante esta última confidencia de Justino, debo reconocer que en otro tiempo me hubiera reído un rato, pero dado el tono y la convicción de su voz, entendía que hablaba en serio, y no tuve mas remedio que guardarme mis comentarios para una mejor ocasión.

Busqué a Pablo cuando tenía mi propuesta terminada y empecé a explicarle mis casi 15 diapositivas amigo – en ese momento tuve el impulso que por cierto no pude detener y le interrumpí preguntando a Justino, motivado por el número de diapositivas que dijo- ¿Y de que hablaban tantas diapositivas amigo? – hago un breve paréntesis para compartir algo que dijo un CEO de un banco de nicho, solo tengo tiempo para 3 diapositivas y ya , si bien es cierto que eso no dice mucho, la idea de este ejecutivo es simple: “Deben ser capaces de explicar en 15 minutos sus propuestas”, me recuerda ahora que lo pienso al libro maravilloso: “El ejecutivo al minuto de Ken Blanchard y Spencer Johnson”, pero me desvié mucho del tema principal, regresemos a la conversación- mi amigo me miró con cara de ¡arruina historias! y me dijo:

-Las primeras 3 de los sistemas necesarios, las 5 de los aspectos de infraestructura, y las últimas de plan de trabajo y presupuesto en general

Contuve la risa durante tanto tiempo que no pude disimular más, Justino lejos de avergonzarse o enojarse (cosa sorprendente en él) me miró con cara de inocencia retratada en el rostro y dijo: “No tenía idea amigo, Pablo vio solo las dos primeras y me interrumpió muy cortés”

Ahora eres un director general Justino, me puedes decir por favor el modelo de negocio y como vamos a calcular el ROI, tu análisis financiero y proyecciones por favor – decía Pablo, mientras clavaba su mirada en mis ojos amigo-

Le respondí como pude, entendía perfectamente que mi presentación NO tenía nada de lo que me estaba pidiendo, más bien … estaba muy lejos de lo que me estaba pidiendo Pablo -en ese momento quería estar a 20 kilómetros de ahí amigo, muy lejos- Mi jefe hizo una pausa para esperar una reacción mía, con una mueca apenas dibujada en la boca pero en clara señal de enfado – Le dije que si por favor me permitía revisarla y que regresaría la semana siguiente para su aprobación – solo asintió con la cabeza y me salí casi a trompicones de su oficina –

Al llegar a mi escritorio amigo – seguía narrando Justino – me hundí en la silla, mirando los papeles alrededor, los diagramas de arquitectura pegados en la pared, de un par de libros técnicos olvidados, revisé torpemente mis pendientes y encontré que tenían un patrón en común.

Me devanaba el cerebro pensando en como podía encontrar una manera para cumplir la misión y, cuando mas desesperado estaba … el cerebro ingenieril finalmente vino a mi rescate, y empecé con este razonamiento Héctor.

“En tecnología tenemos metodologías y procesos para hacer las cosas, quizá para negocios haya algo parecido, no creo que la gente de productos y negocio no tengan una serie de algoritmos ya probados a manera de receta”

Y empecé a buscar la manera de aprender de negocios, esto me llevo a mucha información, muchos libros, artículos, blogs, podcasts y era tanto el agobio de información, que nuevamente me sentí perdido, ¿recuerdas? – dijo seguro ante una mueca de mi cara – solo tenía una semana para cumplir con la primera tarea que me habían encargado amigo.

Y de nuevo, tomé aire y me puse a pensar en como hacer algo rápido que favorezca al negocio digital, no puede ser que sea tan complejo si es como … y allí en ese momento amigo, llegó mi momento ¡Eureka! grité lleno de felicidad y dando saltos de alegría amigo, me sentí renovado, con nuevas fuerzas para el reto, feliz de saber el camino, ahora solo queda recorrerlo, me dije para mis adentros …. y empecé por el principio.

Y le llevé una presentación amigo, que … – ¡espera Justino! le dije alzando la voz y extendiendo la palma de la mano hacia afuera, con la señal de ¡para!-el pobre Justino se detuvo abruptamente sorprendido por mi repentina y exagerada mueca … – espera amigo, dije suavizando la voz – resulta que se te olvidó la parte más importante de la historia ¿Qué descubriste? ¿Como llegaste a una conclusión de sentirte confiado en tu encargo?

Justino sonrió y dijo: ¡Qué torpe! es cierto amigo, te ofrezco disculpas por favor, me volvió a ganar la emoción supongo por lo que ya no te dije que descubrí:

“Una transformación digital es sinónimo de negocio digital, para lo cuál se deben usar esquemas ah hoc con el margen digital”

Justino

Ante mi sorpresa, Justino se tomo tiempo para explicarme el proceso de transformación, me indicó que empezó con un modelo de negocio Canvas, y una vez lleno el lienzo, se pasó a revisar como funciona una Fintech – Llegado este punto y mi cara de sorpresa, Justino sacó su iPad y me mostró el siguiente diagrama que me compartió después, donde me explicó lo siguiente:

“Si quieres un negocio exitoso, sigue los principios de la Ley Fintech”

Justino

Me comentó que dichos principios los tomo de dicha Ley, los integró como parte base de su presentación de negocios y sobre este modelo de una sola diapositiva, le expuso a Pablo (el Chairman del grupo) la táctica y su estrategia.

Al terminar su relato con Pablo, Justino se le veía contento no podía disimularlo, su mundo había cambiado de ser un tipo técnico a uno de estrategia, y estaba muy orgulloso en su fuero interno por este logro.

Casi al final de la charla, le pregunté ¿Y cuál ha sido la lección más grande amigo que aprendiste? – Lo pensó solo unos cuantos segundos y me dijo muy serio:

“A dirigir un negocio para el negocio, apoyado de la herramienta tecnológica” – Ha sido mi mayor aprendizaje dijo Justino

Un buen amigo

-¡Espera! dije abruptamente eso lo hacías antes amigo – ante lo cuál replicó – En realidad no Héctor, antes la herramienta tecnológica que da valor al negocio era mi responsabilidad, podemos decir que estaba orientado y operaba, hoy día es el negocio para el negocio, podemos decir que estrategia buscando la rentabilidad – no dije nada mas, solo asentí con la cabeza, ese gesto tan peculiar cuando te encuentras frente a una verdad innegable –

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Muchas gracias por leer cuanto escribo, te mando un saludo y nos vemos en el siguiente artículo de la serie #CharlasConJustino